La construcción industrializada comienza a despegar en España. Este modelo nos permite construir mejor, optimizando los tiempos de ejecución, evitando los errores y aplicando criterios de economía circular y eficiencia energética al proyecto.
En la actualidad, el porcentaje de edificios construidos siguiendo este nuevo sistema constructivo está en torno al 1%, una cifra realmente baja si la comparamos con otros países de nuestro entorno, como Holanda, donde el 50% de lo que se construye hoy es modular. Sin embargo, el sector ha visto la importante oportunidad que supone la construcción industrializada y comenzamos a ver interesantes proyectos donde, además, no solo se apuesta por construir más rápido, sino mejor y más verde.
Viajamos hasta Hospitalet de Llobregat, en Barcelona, uno de los municipios más densamente poblados de Cataluña (el segundo según datos del INE), con una elevada demanda de vivienda en su casco urbano. Allí, 011h Sustainable Construction –constructora de nueva generación, con un alto componente de tecnificación y muy comprometida con la transición hacia un entorno urbano sostenible y saludable– y la promotora Renta Corporación –grupo inmobiliario especializado en la compra, rehabilitación y venta de edificios– han llevado a cabo un interesante proyecto donde construcción industrializada y sostenibilidad se dan la mano.
Se trata del proyecto Life Habitat Hospitalet, un bloque plurifamiliar de viviendas en tres alturas construido con estructura de madera, tecnología y data (nivel avanzado de BIM-Digital Twin), que ha logrado el certificado 4 hojas VERDE de GBCe.
“Este es el primer proyecto desarrollado por 011h, junto con Renta Corporación, y para nosotros era muy importante que una entidad externa certificase su sostenibilidad, porque una cosa es decirlo y otra poder acreditarlo. Elegimos hacerlo con la herramienta VERDE de GBCe porque está adaptada el mercado español y a su Código Técnico de la Edificación (CTE), además de estar alineada con el marco europeo y el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Además, yo soy consultor acreditado VERDE y el trabajo con GBCe siempre ha sido fluido, sencillo y cercano”, explica Toni Escudé, Head of Health & Sustainability en 011h y consultor VERDE.
En un principio, el proyecto optaba a 3 hojas VERDE: “Queríamos que el edificio se percibiese como realmente sostenible, pero era el primer proyecto de nueva creación, donde se integran equipos multidisciplinares, y nos preocupaba no llegar a las 4”, relata Escudé. Finalmente, y pese a que, como cuenta el consultor VERDE, el trabajo fue algo improvisado, “dado que estábamos aprendiendo de esta experiencia”, el edificio logró alcanzar las 4 hojas VERDE… Y no fue nada sencillo.
Una vivienda orientada al norte, entre medianeras y achaflanada
Una de las mayores dificultades a las que tuvo que enfrentarse el equipo de 011h y Renta Corporación fue la propia disposición de la parcela, ya que es un solar esquinero achaflanado, orientado al norte, y situado entre medianeras, “lo que dificultó mucho lograr algunos de los requisitos de VERDE, como la gestión y el ahorro de energía”, aclara Escudé. Por eso, durante la fase de diseño del edificio se realizaron gran cantidad de ejercicios de simulación energética, abordando hasta 10 escenarios diferentes, todos controlados a nivel de precios. “Se realizó un importante trabajo sobre la envolvente térmica del edificio y la ventilación natural cruzada, y se apostó por la incorporación de buenas medidas activas para optimizar su eficiencia energética”, explica el consultor VERDE.
El edificio cuenta con instalaciones centralizadas de calefacción–“con el consumo controlado a nivel individual”–; paneles fotovoltaicos y sistemas de aerotermia optimizados, superando siempre lo establecido por el CTE. De hecho, el edificio ha logrado una calificación energética doble A (tanto en consumo de energía como en emisiones contaminantes).
Además, se realizó un importante trabajo en el apartado de Recursos Naturales, logrando una excelente puntuación en cuanto a la elección de los materiales, con un 100% de maderas certificadas, y en la gestión de recursos como el agua “pese a que, por problemas de espacio no pudimos establecer mecanismos para la recuperación de aguas pluviales y de aguas grises”, aclara Escudé.
El proyecto ha obtenido la máxima puntuación tanto a nivel de Ambiente Interior –calidad del aire, protección del ruido, toxicidad de los materiales…–, como en Calidad de la Edificación, donde el empleo de la plataforma de trabajo de 011h ha agilizado notablemente el proceso de intercambio de información.
¿Es rentable construir VERDE?
Otro de los mayores desafíos que ha tenido que superar este proyecto ha sido el económico, que ha podido controlarse gracias a que se trata de un producto industrializado.
Una de las ventajas que ofrece la construcción modular es la de poder controlar los costes del proyecto, optimizando los procesos para ajustar al máximo el presupuesto evitando errores y sobresaltos. “Esto permite tener un edificio de gran calidad en un tiempo muy inferior al de una obra tradicional. El proyecto Life Habitat se ha construido en ocho meses”, destaca Escudé.
El proyecto ha sido comprado por una promotora que veía la sostenibilidad del inmueble como un valor añadido a explotar, “ya que lo consideraban un producto muy superior, capaz de mantener su precio de mercado en el tiempo”, finaliza Toni Escudé.